El hogar que todos queremos. Punto número 2.

Ayer decíamos que todos queremos un hogar que sea feliz y que la clave de ello es el temor a Dios. Recuerda que he tomado las ideas del Estudio Bíblico del Pastor Julio Contreras de la Serie Casa Modelo. Puedes encontrar esta y otras series en el sitio web de la Iglesia Bautista Vida Nueva: www.ibvn.org .

El segundo punto de este estudio fue que el hogar que queremos:

2. Es forjado. En este caso la clave es el trabajo humano.

El Salmo 128.2 nos dice que “cuando comas el trabajo de tus manos, bienaventurado serás y te irá bien”. El Salmo 127.1 también nos dice que “si Jehová no edifica la casa, en vano trabajan los que la edifican”. Si bien es cierto como decíamos en el primer punto la primera clave está en el temor a Dios, este segundo punto nos habla de que hay edificadores en cada casa. No es una fórmula mágica la que edifica un hogar sino que es la unión de Dios como principal edificador seguido por los componentes de ese hogar: los padres y los hijos. Esto nos trae una gran responsabilidad: Somos edificadores. Podemos hacerlo siguiendo la dirección de Dios o no. Eso sí, no te quede duda que “comerás el trabajo de tus manos” o como dice Gálatas 6.7 “todo lo que el hombre siembre, eso también segará”. Si nuestro hogar esta lleno, pero bien lleno de nuestra ausencia, un día cosecharemos soledad. Si nuestro hogar está lleno de maltratos, no esperemos cariño al final de nuestras vidas. Lo que siembres en tu esposa, lo que siembres en tus hijos, lo que siembres en tu esposo...eso también segarás. Un principio que aprendí del Dr. Gary Chapman es que para que mi cónyuge cambie, debo cambiar yo primero. Soy yo quien debo sembrar para luego esperar con ... paciencia. Si uno siembra una semilla, y la cuida, y la riega, con paciencia, en semanas o meses o aún años...segarás. No esperes que si has sembrado lo malo en tu familia se dé un cambio de la noche a la mañana. Pero no significa que no debas sembrar lo bueno. Espera...con paciencia...segarás.

Obedece lo que Dios dice y cosecharás:

- Trata bien a tu esposa...y Dios te oirá. 1 Pedro 3.7
- Honra a tus padres...y tendrás larga vida. Efesios 6. 2-3
- Cría bien a tus hijos...y tendrás paz y descanso. Proverbios 29.17
- Se fiel...y conservarás tu matrimonio.

El énfasis en el segundo punto no está en lo que cosechas, sino en el trabajo que debes llevar a cabo al sembrar y cuidar de lo que siembras. Es una decisión seguida de una acción que va seguida de más acción. Es forjado.

Felicidad.
Eres feliz en las áreas en las que obedeces lo que Dios dice.

El tercer y último punto del primer estudio te lo cuento el próximo jueves.
Que no se te olvide, mañana es 14. Un buen día para sorprender a tu cónyuge.

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