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Mostrando entradas de febrero, 2012

2.Sabiduría: ¿Lo debido o lo deseado?

Génesis 25.31-33 Esaú tenía que escoger entre la primogenitura o la comida. A nuestros hijos debemos enseñarles a tomar decisiones con sabiduría. Esaú pensó: "¿para qué me servirá la primogenitura?". Deuteronomio 21.15-17 nos da la respuesta. Si un hombre desprecia a su primer esposa con quien tuvo su primer hijo (el primogénito) y se casa con otra mujer, el derecho de la primogenitura lo conserva el primer hijo de su primer matrimonio entonces "al hijo de la que no ama reconocerá como primogénito, para darle el doble de lo que corresponda a cada uno de los demás...". Sabes que debió tener Esaú al momento de elegir entre la comida y la primogenitura: Sabiduría. ¿Lo debido o lo deseado?. Esaú eligió lo deseado y desechó lo debido. Pablo recomienda a Tito (Tito 2.6) que "exhorte a los jóvenes a que sean prudentes". Proverbios 14.33 dice que "en el corazón del prudente reposa la sabiduría". En Proverbios 14.8 dice que "la ciencia del prudente

Los valores que todos necesitan.

Esta vez escuchamos al Pastor David Guadrón predicar en Vida Nueva sobre los valores que todos necesitamos. El estudio se basó en Génesis 25.27-34. El primer valor a enseñar a nuestros hijos es: 1. Solidaridad: ¿Ayudar o aprovecharse? Si recuerdas la historia de Jacob y Esaú vendrá a tu mente el momento en que Esaú llega de cazar y tiene hambre y le pide de comer a su hermano. Que pensó Jacob: ¿En qué forma me puedo aprovechar de Esaú? y le propuso "Véndeme la primogenitura". La primogenitura implicaba que a Esaú le tocaría el doble de la herencia que a Jacob, pero Jacob se aprovechó de su hermano. ¿Que hubiera hecho un hermano que practicara la solidaridad?. Pues le hubiera dado de comer sin ningún sentimiento de sacar ventaja, por el solo hecho de ser hermanos. Este es un ejemplo de un hermano haciéndole un mal a otro hermano. Que tienen en común estos otros ejemplos: - Caín y Abel (Gn.4) - José y sus hermanos (Gn.37.2-5) - Moisés, Aarón y María (Núm.12.-1-4) - Abimelec y l

3. Un ambiente de predilección (v.27-32)

Es un grave error tener hijos predilectos. Todos los hijos son diferentes...hasta contrastantes. En el caso de Isaac y Rebeca y sus dos hijos: - Esaú era el áspero, era el preferido del padre: era un hombre del campo. Era el físico, el hábil, el sucio, el “bullista”, el inquieto, el mal estudiante, el buen deportista, el sensorial. Era el hijo de papá. - Jacob era el bueno, era el preferido por la madre: era un hombre "quieto". Sin embargo su nombre significaba: suplantador. El limpio, el ordenado, el que conversa, el que hace los deberes, el que no hace bulla, es el niño bueno. Es el hijo de mamá. - Isaac y Rebeca tenían preferencias, eran una pareja desunida. Léelo despacio: Tener favoritismos, generar competencia, ser sobreprotectores, ser sembradores de discordia, tolerar la autodestrucción, tolerar la irresponsabilidad. Terminan mal. Preguntas: ¿Cómo reaccionas cuando le señalan faltas a tus hijos? ¿ Tienes tú un favorito? Què debemos hacer: Efesios 6.4 dice "Y vos

Una atmòsfera de peleas

2. Una atmósfera de peleas. (v.22-26) Dios contestó la oración de Isaac. La Biblia dice: "lo aceptó Dios, y Rebeca concibió". Sin embargo, el versículo 22 dice que "los hijos luchaban". La palabra luchaban puede traducirse también como romper en pedazos, oprimir, quebrantar, magullar, romper, quebrar, agraviar. Así que imagínate que situación se vivía en el vientre de Rebeca. Cuando nacieron siguió habiendo una diferencia entre los hermanos. Tú conoces la historia. Proverbios 18.19 dice que "las contiendas entre hermanos son como cerrojos de alcázar". Otras traducciones hablan de que estas contiendas "separan como las rejas de un palacio", es decir, que dividen. El fruto de todo esto lo puedes ver en Génesis 27.41-42 donde se ve el odio entre hermanos hasta incluso desear la muerte. Ahora bien, por qué no hubo una intervención correcta de los padres. Si lees la historia verás que en lugar de reunir a los hijos y proponerles una reconciliación lo

Las luchas que nadie quisiera

Basado en Génesis 25.19-34 (El hogar de Isaac y Rebeca) Este domingo en Vida Nueva el Pastor Contreras nos hablaba de las luchas que nadie quisiera...pero que ahí están. La casa modelo ¿es mito o es realidad?. Cuando se estudia la Biblia uno se da cuenta que a lo largo de la historia la mayoría de familias u hogares son imperfectos, con cosas buenas y cosas malas. No existe la familia perfecta. Desde Adán y Eva hasta nuestros tiempos no ha habido una familia que no haya tenido dificultades o que no haya cometido errores. Posiblemente habrá alguna que puedas decir: "esta no está del todo mal, es mas creo que está bien", sin embargo en el fondo siempre hay luchas tremendas. El primer punto de este estudio trató sobre lo que se denominó: 1. Un arranque con problemas (v 19-20). Si se analiza la vida de Isaac y Rebeca uno puede llegar a la conclusión que era la pareja perfecta. Eran una pareja que lo tenía todo: - Aprobados por Dios y sus padres: Gn 24.27 - Había amor: Gn.24.27 -

El tercer punto

3. Es fructífero. En este caso la clave es el trato personal El hogar que todos queremos debe ser fructífero. Los versículos 3 al 6 del capítulo 128 de salmos nos hablan de eso. De estos puedes sacar algunas conclusiones aplicables a tú hogar. - Hay una familia nuclear. El versículo 1 aplica a toda la familia pero sobre todo al padre como cabeza del hogar. El versículo 3 nos muestras los otros componentes de una familia diseñada por Dios: una esposa, unos hijos. No habla de dos hombres o dos mujeres. Habla de un esposo y una esposa. También habla de hijos. Ese es el diseño de Dios. Punto. Si conoces a alguien que no esté de acuerdo con ese diseño, pues que vaya y le reclame a Dios. - Hay una mujer fructífera. El versículo 3 habla de que la mujer será como la vid que lleva fruto. Un tipo de fruto son los hijos. El Salmo 127.3 dice que los hijos son herencia de Jehová y que es cosa de estima el fruto del vientre. Ahora bien, que tal si el tipo de frutos que se dan en la familia son los

El hogar que todos queremos. Punto número 2.

Ayer decíamos que todos queremos un hogar que sea feliz y que la clave de ello es el temor a Dios. Recuerda que he tomado las ideas del Estudio Bíblico del Pastor Julio Contreras de la Serie Casa Modelo. Puedes encontrar esta y otras series en el sitio web de la Iglesia Bautista Vida Nueva: www.ibvn.org . El segundo punto de este estudio fue que el hogar que queremos: 2. Es forjado. En este caso la clave es el trabajo humano. El Salmo 128.2 nos dice que “cuando comas el trabajo de tus manos, bienaventurado serás y te irá bien”. El Salmo 127.1 también nos dice que “si Jehová no edifica la casa, en vano trabajan los que la edifican”. Si bien es cierto como decíamos en el primer punto la primera clave está en el temor a Dios, este segundo punto nos habla de que hay edificadores en cada casa. No es una fórmula mágica la que edifica un hogar sino que es la unión de Dios como principal edificador seguido por los componentes de ese hogar: los padres y los hijos. Esto nos trae una gran respons

El hogar que todos queremos

Este dìa en Vida Nueva empezamos una serie enfocada en el Hogar (llamada Casa Modelo), por lo tanto, ùltil en nuestras vidas. Un dìa fuimos hijos y por ende fuimos parte de un hogar. Ahora somos padres/esposos lo que indica que formamos un hogar. El pastor Julio Contreras nos hablaba de varios puntos importantes los cuales quiero repasar. La base de este estudio està en el Salmo 128. Para empezar debemos reflexionar en dos preguntas. La primera de ellas es ¿Hay algo que se pueda mejorar en nuestros hogares? Usualmente la respuesta es sì. Si respondes que no, lo más probable es que no te has dado cuenta de los problemas que tienen. La segunda pregunta es ¿Te interesa mejorar en esos aspectos débiles que forman la respuesta de la primer pregunta? Nuevamente, usualmente la respuesta es sì, pero puede que digas que no lo cuàl indica un grave síntoma de disfunción familiar en tu vida. Bueno, revisemos los puntos del estudio. Si te imaginas como debe ser el hogar en base a los principios de